Si has leído nuestros últimos artículos sobre el autoconsumo es probable que te hayas dado cuenta de que existen diferentes modalidades para gestionar la energía que podrías producir de sobra. Una de ellas es la compensación simplificada de excedentes, una compensación financiera que puede tener varias formas. A continuación, te explicamos cómo funciona.
¿Qué son los excedentes de una instalación de autoconsumo?
Se dice que se generan excedentes cuando no se llega a consumir la totalidad de la energía producida por una instalación de autoconsumo. Se puede disponer de estos excedentes de varias maneras:
- No hacer nada con los excedentes (derrochar la energía generada de sobra)
- Venderlos al mercado eléctrico (estará en este caso ejercitando una actividad económica)
- Descontar el valor asociado a algunos importes de tu factura mensual
- Almacenar su valor económico de manera virtual para reducir cualquier factura a lo largo del año
Los puntos 3 y 4 hacen parte de lo que se llama la compensación simplificada de excedentes.
¿Cómo se calcula el valor de los excedentes?
Hemos dicho que los excedentes de producción de una instalación de autoconsumo se pueden compensar con un valor monetario. Ese valor no es aleatorio y depende por una parte del coste en euro del kWh de excedentes (según lo contratado con la comercializadora) y, por otra parte, de la cantidad de kWh elegibles a compensación.
El cálculo del coste de los excedentes se hace en dos tiempos: determinando primero el balance neto horario de tu instalación y luego, aplicando el sistema de compensación simplificada de excedentes.
El balance neto horario
El balance neto horario es la diferencia entre la cantidad de energía vertida a la red (producción no consumida) y la energía comprada de la red (cuando no produces suficientemente para cubrir tu consumo) y eso durante cada hora. Hablamos de un resultado en cantidad de kilovatioshora.
Para cada tramo horario pueden pasar dos cosas:
- Si compras más energía de lo que viertes a la red entonces esa cantidad (kWh comprado – kWh vertidos) será reflejada en tu factura de la misma manera que un consumo de energía normal al final del mes (en número de kWh consumidos y con un precio en €/kWh según la tarifa contratada).
- Pero si viertes más energía a la red de la que compras, entonces, esa cantidad sobrante de energía (kWh comprado – kWh vertidos) entra en el mecanismo de compensación mensual.
La compensación simplificada
La cantidad de energía que se va a compensar no es más que la suma de todo lo acumulado en el punto 2. anterior a lo largo del mes.
A estos kWh vertidos corresponde un precio (según lo contratado con tu comercializadora).
Para realizar la compensación mensual, la comercializadora resta el importe de tu consumo de la red (punto 1.) y otros costes de tu factura al importe de la energía vertida (punto 2.).
Es posible que tus facturas lleguen a un total a pagar de 0€* pero en ningún momento podrán ser negativas, como si la comercializadora te tuviera que pagar para ello. Eso se debe al hecho de que con la compensación simplificada de excedentes no estamos realizando una actividad económica, por lo tanto, no podemos cobrar dinero por ello.
La compensación simplificada como tal no es acumulable a lo largo del año. Sin embargo, algunas comercializadoras te ofrecen la posibilidad de contratar un servicio de batería virtual que si es acumulable, sin cantidad límite ni fecha de caducidad. Te lo contamos más en detalle en este artículo.
*Todas las comercializadoras no compensan los mismos términos de la factura, algunas te permitirán compensar todos los gastos mientras que otras no incluirán, por ejemplo, el alquiler del contador o los peajes y cargo a la hora de restar. En este caso, tendrás que pagar la integralidad de los costes correspondientes.